jueves, 6 de noviembre de 2008

De Viejos Aromas

Sin duda, las cosas habían cambiado mucho .
Allá por el 1999, cuando nos hacía temblar la historia del fin del mundo, jamás imaginamos un futuro como este.
Esperábamos destrucción, plagas y pestes, terremotos, maremotos y cataclismos interestelares.
Esperábamos guerras atómicas inevitables, naturalezas muertas, especies extinguidas, y humanos mutantes. No fue así.
Increíblemente, razonamos a tiempo y salvamos nuestro mundo.
Ahora , en paz con El Creador y con el medio ambiente, compartimos la
Tierra con las otras especies( animales y vegetales) en perfecta armonía.
Los grandes sabios del siglo 20 , gastaron sus energías, canalizaron sus
esfuerzos mentales, en descubrir la fórmula que nos permitiera descubrir
otros mundos. Futuros hogares salvavidas.
Pero el año 2000 no fue el final, sino el comienzo del despertar.
En lugar de perder tiempo buscando como huir de la destrucción, se
comenzó a estudiar como hacer para no tener que emigrar.
Fue relativamente fácil descubrir como vivir sin matar.
Nuestro promedio de vida, 200 años. Morimos solo por causas naturales, o
accidentes inevitables.
El compuesto alimenticio a base de minerales y químicos nos mantiene sanos y fuertes hasta el final de nuestras días.
Ya no comemos seres vivos, tampoco nada que provenga de ellos(ni animales, ni plantas, ni frutos)
No transpiramos, ya que con el alimento, absorbemos cierto compuesto que nos mantiene frescos limpios e hidratados a pesar de la alta temperatura reinante.
Después de varias pruebas genéticas, los científicos lograron que nuestra piel se auto genere cada 15 días, desechado la sucia.
En fin, somos casi perfectos. Digo casi, porque aún no pudimos olvidar el pasado, que increíblemente regresa en nuestros sueños, dejando en nuestras mentes un halo de nostalgia.
Y buscando ese ayer, queriendo revivir aquel lejano siglo 20 , es que hoy 31 de diciembre de 2999 nos despedimos del siglo 21 obsequiándonos mutuamente cajitas de perfume.
Las últimas fragancias descubiertas, las mas codiciadas: de Pierre Cerdeen :Papas fritas con churrasco. De Elizabet Agrden :Asado a las brazas. De Paloma Picacxoo :Cazuela de mariscos. De Cristiani Diorr :Panchos con panceta...
Y así nos despedimos de este siglo, recordando los aromas del pasado.